lunes, 11 de mayo de 2009

En el país de Nunca Jamás


Llevo mucho tiempo queriendo decir que tengo 13 años pero aún tengo a mi osito de peluche "Piecito". Piecito tiene también 13 años y estoy orgullosa de él.

A Piecito le cuento todos mis problemas, mis opiniones, que si Menganito o Fulaanito están muy buenos, que si Pepita es una borde... Para que os hagáis una idea si ese osito hablase os podría contar más de mi y mi manera de pensar y actuar que yo misma.
Cuando estoy triste siempre se lo cuento y le lloro y le pido consejo y siempre me dice lo mismo "Abrázame", y siempre funciona.
Piecito a su manera es un icono de mi infancia.

El título de la entrada se debe a que yo quiero tener siempre a Piecito conmigo y ser pequeña, lo que no quiere decir que no sea madura y responsable. Lo que pasa es que recuerdo cuando Piecito me daba un poquito de miedo (era tan grande y marrón...). Para mí Piecito no es un peluche, es mucho más, es como mi amigo.

El sentido de este post es que pensemos un poquito en cuando eramos pequeños, y no tan pequeños.
Talvez así podaoms entrar en el país de Nunca Jamás.

Besitos.

8 comentarios:

Paquita Pedros dijo...

Hola cielo que lindo es tu peluche es bonito tener un peluche y contarle tus cosas me encanto tu entrada
un beso de Luna

Nadym dijo...

Qué bonito escribes nena, si serás una plumilla como yo y todo. Pero que sepas que yo también te voy a dar muchos abrazos como piecitos. Un besote guapa, te quiero.

Claudia dijo...

aww que boniitoo¡¡ y que mono piecitos, me lo presentaras?? ajaj eso espero

besos¡¡

Hada Azul dijo...

Luna, si, es bueno tenerlo. Besos.

Nadym, como tu?? lo dudo muchísimo!! y yo te los devolveré tantas veces como haga falta. Te quiero.

Claudia, tu ya lo conoces!! pedazo de memoria de pez... jajaja pero bueno, yo te lo vuelvo a presentar pero ya sabes.. es mio!! jajaja. Besotes.

Pecorilla dijo...

Yo no tengo trece años (tengo el doble :) ) y no tengo ninguna mascota de peluche a la que contarle mis cosas. Si que tengo una, pero no tengo esa confianza con ella porque hace poco que nos conocemos.

La oveja de peluche a la que si que le contaba todo murió descabezada por un chico que hace tiempo que ya no es mi novio. Casi le arranco yo a él la cabeza a él. Tuvieron que sujetarme entre tres vecinas para obligarme a soltarle.

En definitiva, como no tengo a Gertrudis para contarle eso pues lo escribo en un blog.

Por otra parte es una tontería ser pequeña, pero lo que si estña bien es no dejar de jugar, o al menos juar de vez en cuan do y tener un punto de vista lúdico de la vida.

Saludos.

Hada Azul dijo...

Pecorilla, una lástima que perdieras a Gertrudis. Yo he tenido y tengo muchos, cada vez más peluches y a cada uno lo voy conociendo poco a poco algo más. El más reciente lo tengo desde hace cuatro dias, la verdad es el más bonito pero no tengo tanta confianza con el.

Lo de ser siempre niña, no sé, creo que con la edad de peluches (aunque no esté definida y sea para siempre) pero sí de juguetes algo más infantiles, es decir, alrededor de los cuatro o cinco años, la vida es mucho más facil, apenas hay problemas, no tienes tantas cosas en la cabeza,... en fin, todo (bajo mi punto de vista) es diferente y mejor.

Besitos.

Unknown dijo...

Yo tengo a Limonsito... :D
El otro día estuve viendo fotos antiguas y encontré una cuando él era chiquitín, tan amarillo, todavía conservaba su lacito del cuello y relucía. Ahora es viejito, el amarillo no deslumbra, pero es más importante, porque me ha acompañado cada noche desde hace 20...
Mil besos!!

Hada Azul dijo...

Bebita, el mio en 13 años apenas a cambiado, sigue marrón y simplemente se le fue un poco un hilo, pero cosa de nada, se cosió y ya está :D.

Besotes.